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miércoles, 31 de enero de 2018

El ictus cerebral, cómo identificarlo por síntomas.

Si en el vídeo anterior hablábamos de cuáles son los síntomas más frecuentes en un infarto agudo de miocardio, en esta ocasión haremos lo mismo con su equivalente cerebral, el ictus. En el vídeo hablaremos de los tipos básicos de ictus, pero, sobre todo, qué síntomas pueden sugerir que estamos ante un ictus, y también, qué otros síntomas, que muchas veces alarman al paciente, no son tan propios de un verdadero ACV.

Esta información es importante, porque, al igual que sucede en el infarto agudo de miocardio, cada minuto perdido, supone una pérdida de millones de células vivas (en este caso, cerebrales).

Y por ello, cada minuto cuenta, y esto no sólo se aplica al tiempo de traslado en ambulancia o al tiempo de espera en urgencias, sino que también se aplica al tiempo que tarda el paciente en identificar que se encuentra ante una emergencia médica. Una rápida identificación implica una mayor supervivencia cerebral.





sábado, 13 de enero de 2018

Los síntomas más frecuentes de un infarto agudo de miocardio.

En atención primaria es muy frecuente que un paciente acuda por un cierto síntoma, pero no para solucionarlo, sino por la alarma que le genera ("¿y si esto que siento es algo malo?"). Y dentro de este tipo de síntomas, uno de los más frecuentes es el miedo a un infarto agudo de miocardio.

En el vídeo de hoy hablaremos de ello, pero empezaremos explicando qué es un infarto, porque en la cultura general existe mucha confusión con los problemas bioeléctricos, tales como las arritimias, las extrasístoles (palpitaciones) o las paradas cardíacas, los cuales no son infartos (aunque la consecuencia final de un infarto pueda ser eléctrica).

El infarto agudo de miocardio no es un problema "del electricista", sino un problema "de fontanería": el infarto es la muerte de células por falta de riego sanguíneo, en cualquier órgano del cuerpo. En el caso del corazón, el infarto agudo de miocárdico es, evidentemente, la muerte de células musculares cardíacas por falta de riego coronario.

Por ello, el síntoma tradicional del infarto es el DOLOR, aunque como explicaremos, no sólo, y no siempre, es el dolor.

Consideramos que es importante que la población adquiera una cierta cultura sobre esta sintomatología, dado que durante un infarto, los minutos y las horas cuentan de un modo crítico: Las obstrucciones coronarias son susceptibles de ser solucionadas, y cuanto menos tiempo se tarde en solucionarlas, menos gramos de masa cardíaca perderemos ante este evento.
 
Por ello, no sólo es importante una rápida respuesta de los servicios sanitarios, sino también una rápida reacción del paciente que sufre un infarto o de su entorno. No es extraño que una persona demore unas horas su asistencia al hospital, por tener dudas sobre si sus síntomas son de alarma. Horas en las que se podría haber salvado una mayor cantidad de masa miocárdica.


domingo, 5 de noviembre de 2017

Riesgo Cardiovascular II: El Colesterol. Por qué se habla de "bueno" y "malo"

En esta ocasión hablaremos del papel que juega el colesterol en el riesgo cardiovascular. Es una molécula única, sin embargo hablamos popularmente de "bueno" y "malo", según a qué lipoproteínas transportadoras vaya unido.

También hablaremos de cuáles son los alimentos más y menos convenientes para mantener unos buenos niveles de colesterol, y por qué, en ciertas patologías genéticas, no nos queda más remedio que recurrir a la ayuda de un fármaco para poder mantener unos niveles que no comporten una elevación del riesgo.






viernes, 3 de noviembre de 2017

Las enfermedades cardiovasculares

A diferencia de la publicación anterior, en que hablábamos de las enfermedades venosas, en este vídeo vamos a hablar sobre las enfermedades que afectan al árbol arterial: las enfermedades cardiovasculares. Es un concepto que engloba a las enfermedades arteriales que afectan a:


  • Arterias coronarias (infartos agudos de miocardio, anginas de pecho).
  • Cerebrales (ictus cerebrales, isquémicos y hemorrágicos).
  • Retinianas (aneurismas retinianos, retinopatía hipertensiva).
  • Arterias renales (nefroangioesclerosis).
  • Extremidades inferiores (amputaciones, claudicación intermitente).
  • Otras (anginas intestinales e infartos mesentéricos, aneurismas de la aorta abdominal, etc).

Aunque resulte sorprendente, todas estas enfermedades están provocadas por la misma causa: la formación de placas de ateroma en la pared arterial, y por ello reciben el nombre común de enfermedades cardiovasculares.

Como explicamos en el vídeo, conocemos factores fuertemente asociados estadísticamente al desarrollo de estas enfermedades, algunas de las cuales no podemos modificar (edad, genética...), pero la mayoría de las cuales podemos modificar (tabaco, hipertensión arterial, diabetes mellitus, niveles elevados de colesterolemia). No sólo conocemos la asociación estadística, sino que cada vez está más establecido el mecanismo causal.

Por ello, el principal caballo de batalla del médico de familia va a ser el control del riesgo cardiovascular, dado que a día de hoy, este conjunto de enfermedades (que en realidad pueden considerarse la misma enfermedad en definitiva) siguen siendo el principal causante de morbimortalidad en nuestro país.

En próximos vídeos nos centraremos detalladamente en algunos de esos factores causales modificables más detenidamente.





martes, 16 de octubre de 2012

Entrevista a nuestra nutricionista, Raquel Martínez Garnelo

Haciendo click en este enlace pueden acceder un extracto de la entrevista del Diario de Pontevedra a nuestra nutricionista, con motivo de la celebración del Día Mundial del Huevo.

Dicho día se celebra con la intención de recordar sus cualidades nutricionales, principalmente por su alta calidad proteica (la composición de sus proteínas contiene una de las proporciones de aminoácidos esenciales más idóneas posibles para la nutrición humana).

También es importante recordar que el consumo de 3 o 4 huevos a la semana no agrava el perfil lipídico, (no empeora la proporción de colesterol LDL "malo" en sangre) salvo en pacientes con ciertas patologías, debido a que hoy sabemos que es mucho más importante la cantidad de grasas saturadas (y de insaturadas trans) a la hora de generar niveles altos de LDL-colesterol.
 
Si lo desean, Pueden complementar la información en la página "Xente con Vida", de la Consellería de Sanidade de la Xunta de Galicia. (Pulse aquí para ver el enlace), y en la página de consejos para los pacientes con dislipemia o colesterol alto de la página web de fisterra.com.